Si acabas de terminar tus estudios hace poco o estás pensado en cambiar de sector seguramente tengas dudas sobre por dónde empezar a buscar trabajo.
Antes de lanzarte a mandar currículums a todas partes el primer paso es identificar cúal es tu objetivo profesional. Es decir, delimitar a que te quieres dedicar. De otra forma terminarás con frustración al ver la cantidad de candidaturas que te son rechazadas, pues estás aplicando a ofertas que probablemente no se adecuen a tu perfil actual.
A la hora de definir tu objetivo debes pensar de qué te gustaría trabajar. Una vez sepas esto investiga sobre cuáles son los requisitos que se piden para ese puesto, cuáles cumples y cuáles no. Para conocer mejor los requisitos puedes buscar ofertas de empleo en LinkedIn o en otros portales de empleo del puesto al que te gustaría acceder y ver que piden las empresas, de está forma podrás adaptar tu currículum. Desde Talenttinity te recomendamos tener un perfil de LinkedIn actualizado y atractivo. Si no sabes cómo, aquí te contamos cómo hacerlo.
Conocernos bien a nosotros mismos va a ser algo fundamental. Siempre siendo realistas y pensando en qué puestos podemos encajar y tenemos posibilidades. Para esto analiza las siguientes áreas:
- Formación: ¿Qué estudios tengo?, ¿Qué formación adicional me aporta valor?, ¿Cuál es mi nivel de idiomas?, ¿Qué programas informáticos se manejar?…
- Experiencia: ¿Dónde he trabajado?, ¿Qué funciones realizaba?, ¿Cuál era mi especialidad?…
- Otras cosas que me aportan valor: ¿Sé trabajar en equipo?, ¿Destaco por saber comunicarme en público?, ¿He vivido algún acontecimiento que me ha hecho crecer como persona?…
Conoce cuales son tus puntos fuertes. Piensa que se te da bien y cómo puede eso aplicarse a tu puesto de trabajo. De esta forma, de cara a una entrevista cuando te pregunten qué puedes aportar a la empresa sabrás dar una respuesta profesional sobre ti.
Piensa también en tus debilidades. Si son debilidades que tienen solución, como puede ser no tener conocimientos en un campo que vas a tener que manejar a diario en tu puesto puedes apuntarte a un curso para formarte. Si por el contrario no tienen solución busca ofertas donde esa debilidad no sea algo indispensable para el día a día.
Si eres una persona a la que le cuesta identificar sus logros puedes preguntarle a tu familia o amigos cercanos. Esto te ayudará a corroborar lo que ya sabes y a identificar aspectos de los que no te habías dado cuenta.
Por último te dejamos una lista de cuales son las ventajas de definir tu objetivo profesional:
- Te ayuda a tomar mejores decisiones y tener confianza en ti mismo.
- Aprendes a identificar mejor las ofertas de empleo y por lo tanto aumentan tus posibilidades de ser contratado.
- Tu formación y tus esfuerzos están alineados con un propósito.
- En las entrevistas de trabajo serás capaz de hablar con seguridad de ti mismo. Pues tienes un plan de hacía donde quieres ir.
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