La creatividad es la capacidad que tenemos las personas de crear nuevas ideas, bien con fines estéticos como el arte o que su finalidad sea resolver un problema.
Todas las personas somos creativas y tenemos que dejar que esa creatividad fluya a través de nosotros y cómo cualquier otra habilidad puede mejorarse.
A continuación te dejamos una serie de hábitos que puedes incluir en tu rutina y qué te ayudarán a potenciar tu creatividad.
1. Reserva un espacio de tiempo en tu día para pensar.
Uno de los mitos más extendidos es que la creatividad nace del caos y nada más lejos de la realidad. Para tener mejores ideas tenemos que reflexionar y hacernos preguntas. ¿Qué problema tengo que resolver? ¿Qué tipo de solución quiero encontrar?
Al igual que cuando se quiere lanzar un producto al mercado tenemos que dedicarle tiempo. Quizás no encuentres la idea que esperabas en el momento pero ya le has dado material a tu cerebro para qué trabaje en un segundo plano.
Una buena herramienta para generar ideas es el brainstorming.
2. Anota todas tus ideas.
Anota todas tus ideas, no importa si son buenas o malas. Una buena idea es aquella qué resuelve un problema y si lo hace de una forma que no se ha hecho hasta ahora es innovadora.
Una vez anotada la idea date un par de días para que repose. Pasado ese tiempo vuelve a ella y pregúntate si resuelve el problema, es innovadora y si tienes los recursos que hacen falta para llevarla a cabo.
Si aún no tienes los recursos necesarios no deseches la idea pues quizás puedas usarla más adelante. Una buena idea es siempre una buena idea.
Si por el contrario ocurre que no nos gustan las ideas que hemos producido pasado ese tiempo no pasa nada. Intenta extraer lo positivo de ellas e intenta transformarlas.
3. Lee, investiga, visita lugares…
Un cerebro estimulado va a estar más dispuesto a crear, por eso tenemos que alimentarlo.
Conocer otras realidades, nuevas experiencias o conocer a nuevas personas son experiencias enriquecedoras y cuando menos lo esperes tendrás una nueva idea. Quizás no sepas de dónde ha surgido pero seguro que ha influido la información que ha procesado tu cerebro.
4. Realiza algún tipo de actividad artística.
Es una forma perfecta de dejar fluir nuestra creatividad, no importa si lo hacemos bien o mal. Busca una actividad que disfrutes, ya sea pintar, escribir, la escultura… Estos son algunos ejemplos qué te ayudarán a concentrar tu atención y desarrollar el fin estético de la creatividad.
5. Escribe un diario.
El objetivo de escribir un diario es desbloquear nuestra mente. Escribe cómo te sientes, tus preocupaciones o lo qué se te ocurra en el momento. Un diario puede ser una herramienta de autodesarrollo que te ayude a tomar decisiones y solucionar conflictos.